A las puertas de la realización en nuestro país del 2do congreso Internacional de Cannabis y Cañamo industrial. «Los albores de la industria del futuro» (24 y 25 de agosto de 2022 en CABA), Diego Meneses, integrante del Movimiento Cannábico Nacional visitó el programa «Nos Vimo´en Disney» (lunes 19 a 21 hs.) por FM radio comunitaria El Brote 90.3 Mhz.
Con gran entusiasmo Meneses definió desde el vamos lo que significa su militancia: «Yo hago política pero no partidaria» . Integrante del movimiento cannábico nacional, el año 2013 le terminó de definir su activismo militante que se notó sobremanera en la serie de definiciones contundentes que plantó en el programa radial. Como por ejemplo este concepto que nos invitó a tomar conciencia: «la semilla es una herramienta (SIC) que podamos usar para alimentarnos, es una proteina más alimenticia que la del ganado vacuno». No es un dato menor ya que tendría un impacto en la industria alimenticia con aristas impensadas en economías regionales. Por eso es que Meneses no duda y define a todo el universo del cultivo cannábico como una «Revolución verde». (*2)
El pudor de la historia
Meneses ofreció un pantallazo de la historia de este cultivo y cual fue su derrotero en diferentes naciones. Estados Unidos, por ejemplo, fue «el primer país en promover y regular el cultivo del cannabis y crear un folclore a través de la demonización de quienes supuestamente eran sus principales consumidores: los negros y los mexicanos.»
Sugestivamente comento que «en la otra punta encontramos a Canadá cuya legislación es referencia para otros Estados y que desde el 2018 logra una legalización total a través de fuertes políticas públicas que permiten avanzar en un modelo de industria cannábica avanzado«
Paraguay en ese mismo año también regula su uso con un conjunto de medidas que facilitan el acceso a insumos al pequeño productor. Paraguay se convierte así en líder mundial del cannabis industrial y volvió a marcar otro hito histórico para el país al prepararse para exportar aceite, proteínas y otros derivados del cannabis no psicoactivo (cáñamo industrial) al mercado de los Estados Unidos y, por primera vez, a Australia y Canadá (*1).
En nuestro país en el primer gobierno peronista en el año mil novecientos cincuenta y dos (!), relató Meneses ya se adelantaban como divulgación agraria los beneficios del cáñamo
Mientras que ya para los años setenta, Argentina cultivaba cáñamo pero, puntualizó, «el estado patriarcal utilizó la prohibición para demonizar al cannabis» en detrimento de otros cultivos más tradicionales y latifundistas del país.
Cabe aclarar, en un breve paréntesis, que el cannabis ha tenido un tratamiento diferencial en las discusiones sobre drogas. Fue, según datos oficiales (INDEC, 2011) la «droga ilegal» más consumida en el mundo y también en nuestro país. (N. de la R. las comillas son nuestras, las vaquitas son ajenas). Además es la sustancia de mayor presencia en detenciones y allanamientos policiales; por lo tanto, la que justifica gran parte del presupuesto abocado al aparato burocrático, judicial y policial.
«Hay un proceso que viene llevando adelante Pablo y gente de su entorno«, señala Meneses. Se trata de pensar al cannabis como una «herramienta productiva» y dejar atrás «debates estériles» . Su acercamiento al proyecto en Villa Ciudad Parque fue porque lisa y llanamente «necesitaba trabajar» y anota a continuación el interesante entramado institucional que se fue armando.
El cogollo de la cuestión: «revolución verde»
Mediante una articulación conjunta con la Universidad de Río Cuarto, el Conicet y el INASE (*3) el Gobierno Comunal lleva adelante el proyecto que ya cuenta con dos invernáculos montados en el Polo Agroecológico para realizar a corto plazo tareas de siembra, propagación mediante instalación de luces LED.
«El consumo del cannabis debería estar regulado«, advirtió Meneses al tiempo que nos contaba que ya «Adquirí mi REPROCANN» (Registro Nacional de personas autorizadas al cultivo controlado con fines medicinales y/o terapéuticos). Se trata de una base de datos diseñada para poder registrar a aquellas personas que cuenten con las condiciones para acceder a un cultivo controlado de la planta de cannabis, con fines de tratamiento medicinal, terapéutico y/o paliativo del dolor (*4)
Quien gestiona los permisos y certifica las semillas es el organismo nacional conocido como INASE, que también se encarga de inscribir variedades vegetales en el registro nacional de cultivares. Al respecto Meneses nos informa sobre el desarrollo en la Provincia de La Rioja de una genética nueva que serían las que se plantarían en el polo. Se trata de la CAT-3 y otras que lleva el sugestivo y poderoso nombre de «Eva», esta última registrada por el criador Martiniano Stanisio que de modo demiúrgico aparece en las emblemáticas fotos de la revista THC cuya entrevista mucho más interesante que los balbuceos de este cronista dejamos en la bolsita de notas al pie (*5)
Dos de las ventajosas cartas que son claves para la sustentabilidad de este cultivo fueron arrojadas por Meneses en la mesa del estudio radial: una es su biomasa con respecto a la celulosa. «es aprovechable un 85 por ciento frente al aproximadamente treinta por ciento que genera el monocultivo de bosques». La otra es algo que a futuro y con el progresivo desarrollo inmobiliario a ojos vista en Villa Ciudad Parque será fundamental si es cierta: el menor consumo de agua y fertilizantes.
En un viraje interesante que tuvo la entrevista, el conductor del programa, Germán Gutiérrez, preguntó sobre la relación familiar de Meneses y cómo es el fumar adelante de las infancias, interrogantes que fluyen caudalosos en el río de la vida sin detenernos a pensar en las niñeces. El «pedir permiso» y «respetar sus espacios» fueron las puntas que nos dejó Diego (a esta altura de la nota ya entramos en confianza) para reflexionar.
Conclusión breve, dos veces buena
En un contexto más amplio esta entrevista invita a reflexionar sobre los lugares protagónicos del “movimiento cannábico”. Por un lado en la discusión pública sobre despenalización de la tenencia y el uso de drogas para consumo personal y por otro en su aporte inconmensurable al sistema de salud así como en reflexionar sobre los límites y alcances de su desarrollo en un país que ha tomado a los cultivos sojeros del modelo agroexportador como un «commoditie» en la ruleta de la timba financiera del capitalismo mundial.
Feliz Pacha
(*1)Fuente: https://www.industriacannabis.com.ar/es/paraguay-primer-pais-latinoamericano-exportar-canamo/
(*2) Si querés más definiciones contundentes aquí dejamos de manera distraida el link para escuchar la entrevista completa: https://www.mixcloud.com/RadioElBrote/nos-vimo-en-disney-15/
(*3) En el conversatorio Intentos modificación Ley de Semillas, Patentes y Resolución de semillas criollas (por el canal Youtube) el periodista de investigación Patricio Eleisegui advierte que el actual presidente del INASE, Obdulio San Martín, es un ex-empleado de Don Mario, empresa de nuestra región dueña de seis de cada diez semillas de soja transgénica como una estrategia de las multinacionales de colocar en puestos claves del Estado personas que han trabajado y defendido el modelo agroindustrial («los zorros cuidando el gallinero», fue la oportuna frase del periodista).
(*5) https://revistathc.com/2022/06/16/martiniano-stanisio-creador-genetica-de-cannabis-argentina-eva/