Gabriela Sanso tuvo que esperar nueve años para que condenaran al policía que asesino por la espalda a su hijo Rodrigo Sánchez. Pero el fallo de la justicia dejó un sabor amargo a las familias que luchan contra la violencia institucional porque el ex agente Lucas Gastón Carranza recibió una pena de tan sólo tres años con libertada condicional.

Gabriela es integrante de la Coordinadora de Familiares contra el Gatillo Fácil y el pasado 27 de agosto salieron a la calle para realizar la décima Marcha contra el gatillo fácil donde nuevamente reclamaron para que se acabe la impunidad y la complicidad que ya les costó la vida a decenas de jóvenes.
A pesar de la disconformidad con la condena Gabriela decidió no apelar para que su familia no sufra una doble victimización por el desarrollo que tuvo la causa y el juicio: “fue una vergüenza” nos dijo en DERECHOS TORCIDOS. “En estos nueve años he visto cerrar causas, sobreseer policías, yo por lo menos tengo algo: el culpable del asesinato de Rodrigo Sánchez es Lucas Gastón Carranza” finalizó la mamá de Rodrigo.