Candela Nitti visita El Brote Radio Comunitaria

Entrevista a Candela Nitti y su camino hacia la justicia «Lo personal es político»

slider2

 

Por Paula Rodriguez

A siete años del siniestro que cambió para siempre la vida de la familia Piccoli Nitti, Cande reconstruye el camino de lucha: del dolor inicial a la organización cotidiana y la fuerza de la comunidad. En este testimonio íntimo y político, relata la negligencia, el rol de la salud pública en este escenario de emergencia en discapacidad y la necesidad de una justicia con rostro humano. Su historia es un llamado urgente a transformar la experiencia individual en motor colectivo.

19 de Abril de 2018 un quiebre, una lucha.

El 19 de abril de 2018, la vida de Candela Niti y su familia se partió en dos. Víctimas de una tragedia vial su hija Azul falleció y Lihuen quedo con secuelas irreversibles. Siete años después, y aún sin sentencia firme, la lucha por justicia continúa. Candela y Maximiliano se convirtieron a la fuerza, en cuidadores,  gestores, militantes y querellantes. A poco tiempo de la esperada sentencia, Cande (así le decimos quienes la conocemos y queremos) puede hoy mirar atrás y extraer de ese dolor atroz aprendizajes que tienen valor político.

“Primero antes de llegar, cuando venía para acá, venía pensando por qué venir, por qué contar, por qué decirlo.»

«Creo que siempre siento eso, que desde el lugar en donde vivimos y los años que hace que acá estamos, es como un compromiso también por todo lo que lo que repercutió, lo que sucedió o lo que atravesó en ese momento mi vida, mi familia y también la comunidad. todo lo que implicó”

El laberinto judicial: años de trabas y negligencia

Durante los primeros tres años, la causa penal fue manejada con negligencia. El abogado que tomó el caso, sin experiencia en este tipo de causas, dejó que prescribiera sin avance real. El imputado, que se mudó a Buenos Aires, alegó problemas de salud para evitar presentarse. La primera audiencia penal fue suspendida. Luego, la causa fue cerrada por “incapacidad cognitiva” del acusado.

“Pero para llegar a los siete años que hace que estamos, pasaron los tres primeros años que fueron los más importantes, por así decirlo, porque era el momento crucial para los peritajes que se tenían que hacer. El Audi estuvo con cinco meses de pedido de captura, se encontró en Buenos Aires, estaban implicados ex jefes de policía, había un mecanismo de poder, Y esto lo traigo o es el motor para traer creo que la forma en que nos encontramos a veces en la indefensión del desconocimiento del aparato.»

«Y ese aparato de poder claramente impacta desde un lugar o desde otro y ahí es donde nosotros nos ponemos y lo personal de lo que hace seguir caminando o viniendo Y contándolo es que que es político en todo lo que nos atraviesa.»

«Yo firmé un poder para él, se llama Emiliano Endrek, se dedicaba a los terrenos, a las posesiones o a lo que tenía que ver con lo jurídico en eso, se quiso hacer cargo. En ese momento o desconociendo determinadas situaciones o haciéndose cargos de determinadas situaciones que tenía que hacerse ante una familia que estaba yo creo que en un shock,  y en todo caso no teníamos conocimiento, porque vivíamos en Córdoba, lidiando los diez primeros días por la vida del Liuén, que pensando realmente si a mí se me había cruzado de qué forma el Audi, de que si me había tocado, como finalmente salió luego en la pericia, y qué era lo que había sucedido. Porque yo tenía que aclarar mi mente pero primero no tenía más una hija y además tenía otra que estaba en terapia intensiva.»

 «También es como en la indefensión de no saber o de encontrarse en shock: no saber cómo mover todo ese aparato, de lo que tiene que suceder, de lo que tenés que hacer, cómo lo tenés que hacer, cómo te tenés que defender.»

«Si vos tenés un abogado, este abogado también está parado desde un lugar, y el no hacer siendo un abogado estás haciendo. Estás haciendo para un lugar, en no hacer, la no acción de una persona que te tiene que defender. quien tiene que defender un lugar: se pone desde un punto humano o va a defender otros intereses, va a orientarle, o va guiarte, o va a no. yo no me voy a hacer cargo de esto te va a guiar a que lo haga otra persona, se va a poner en otro lugar porque él no es idóneo”

Un llamado urgente: cerrar esta etapa, seguir andando

«Con el juicio civil aún sin resolución, Candela apunta a cerrar este proceso este año. Se realizaron ya las pericias físicas, psicológicas y psiquiátricas. El fallo podría significar no sólo justicia, sino una posibilidad simbólica de seguir sanando.»

“Cuando vos pasas al juicio civil porque se cierra el penal, el tribunal igualmente tiene que recibir todas las pericias y ver de un lado y del otro porque necesitan tener en la mesa la posibilidad de definir y haber una sentencia y un fallo… La primera audiencia ya la tuvimos el año pasado, la tuvimos en noviembre, a partir de diciembre comenzamos a hacer las 10 pericias que nos pedían,en el cuerpo de lihue pericias fonoaudiológicas, psiquiátricas y en nosotros.»

«Cumplimos en tiempo y forma con todas esas pericias y con todos los testigos, que van a ir a presentarse a la nueva fecha. Hoy traemos es que si se pasa el 9 de octubre y estamos a un mes y medio de que comiencen nuevamente las ferias judiciales Entonces es otro año más que pasa a necesitar esto en esta instancia donde apelamos a la posibilidad de que podamos cerrar este año y de que la continuidad está en esto está en los tiempos y en estos tiempos impactan directamente en el crecimiento de Lihuén en la continuidad de cosas que tienen que ver con cerrar, bueno, continuar andando

La salud como territorio de lucha

Además del desgaste judicial, Candela y su familia enfrentan la rehabilitación de Lihuen a través de un  sistema de Salud en proceso de vaciamiento y  especialmente en discapacidad. 

“Y te hace parte de venir a contarlo acá es la participación de todos es que Lihuén siga saliendo a la calle, que siga teniendo la escuela propiciando sus posibilidades de seguir estudiando, es el aparato de salud que tiene que funcionar o no, es el aparato del hospital que tenía que estar acorde y rompiendo quizás todos los protocolos para que ella pudiera salir con una ambulancia en media hora y estar en el hospital de niño para ser salvada, pero fue salvada acá, fue salvada en el hospital de Santa Rosa.»

«Entonces ahí es donde creo que hoy cuando uno se pone a caminar desde el dolor empieza a caminar lo político: cuando se pone a mirar desde el lugar donde le toca ponerse o participar, y a mí me tocó ponerme desde este lugar.»

«No solo están disminuidas las prestaciones sino que además los terapeutas no cobran, cada vez son menos las prestaciones que están puestas en función a lo que un pibe para rehabilitarse o para tener una vida social. Se está cerrando cada vez más, eso lo estamos viendo bueno es la crueldad y el exterminio de la justicia social, de la forma más cruda esto es como lo que atraviesa creo que eso respondía a qué venía yo acá hoy.”

“La discapacidad es un espejo en el que nadie quiere mirarse. Pero ahí está lo político también: que un niño pueda volver a hablar, tragar o caminar no puede depender de la suerte o del bolsillo”.

«Vos necesitás que funcione lo mismo un aparato que un aparato de traslados porque tampoco forma parte de una familia, a veces el moverse, para cinco terapias o para dos o para tres o para una, la discapacidad es un espejo en donde nadie quiere mirarse.»

Lo que sí funciona: comunidad, redes y afecto

Candela destaca el rol esencial que tuvo —y tiene— la comunidad del Valle: vecinos, compañeras, radios, organizaciones. Fueron quienes organizaron colectas, marchas, jornadas de visibilización y contención emocional.

“Así que es como sentir lo mismo que a mí me pasó cuando nos acompañaron todos en la ruta, cuando desde este mismo lugar también nos acompañó, nos acompañaron la comuna con un operativo para que no pasara nada, para que estuviera resguardado también el lugar desde donde nos convocamos, hasta donde fuimos a marchar en el lugar del accidente.»

«Hoy en la población educativa, de la escuela hay mucha cantidad de chicos que tienen un montón de situaciones y estamos atravesados por una inclusión que hace una diversidad enorme y riquísima. y se va cada vez abriendo un panorama educativo yo siento mucho más enriquecedor. En nuestro pueblo fueron cosas que fuimos sembrando y seguimos sembrando entonces me parece que también estar acá, es posibilitar a decirlo ya decir todo lo que yo también encontré de bueno en este camino.»

«Gracias a esa red pudimos vivir seis meses en la Casa Ronald, acompañar a Lihuen internada, hacer las terapias”.

«Lo personal es político»: cuando el dolor se convierte en motor colectivo

La historia de Candela es testimonio de una madre, una familia que se plantó ante la injusticia. Que construyo redes, sostuvo vidas, se organizó, y eligió transformar su dolor en una denuncia política y colectiva.

 “Entonces yo creo hay que poner en contexto que todo eso funciona de una forma para que en un accidente de tránsito que puede sucederle a cualquiera, o no, fuera del karma o del destino porque también son  palabras que hacen como un cruce y ahí es donde donde lo personal es político: fuera de la espiritualidad donde estés parado tiene que funcionar un montón de cosas para que la vida continúe, de cualquier persona, la tuya, la mía, la de cualquiera. y en ese aparato político está el Estado y ahí está el hospital que va a funcionar o no, la ambulancia que va a llegar o no, y el lugar donde vas a estar parado, para hacerte cargo de tu responsabilidad civil: ¿Cómo manejabas?  ¿vas a volver o no vas a volver al lugar del accidente?  ¿vas a contar o no vas a contar? bueno esto es lo que me lleva a estar acá.»

Desde Radio Comunitaria El Brote agradecemos de corazón este espacio en el tiempo que Cande nos dedicó abriendo su ser e intimidad. Esperamos ser amplificadores de esta lucha que contiene muchas más.

ENLACE PARA ESCUCHAR LA NOTA COMPLETA EN NUESTRO CANAL DE YOUTUBE


Paula Rosselli

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *