29 de Julio 2020
Etel Capdevila
Traslasierra cuenta con dos hospitales en las cabeceras departamentales, el Hospital Regional de Villa Dolores (emplazado en la ciudad de Villa Dolores, Departamento de San Javier) y el Hospital Regional Dr. Luis F. María Bellodi (emplazado en Mina Clavero, Departamento de San Alberto), este último fue destinado a la población COVID+ y por lo tanto el único espacio dispuesto para que acudan las personas gestantes es el Hospital Regional de Villa Dolores.
Ante el brote que afectó mayoritariamente a Villa Dolores, un grupo de organizaciones de San Alberto presentó el 18 de julio una nota al presidente del COE (Centro de Operaciones de Emergencias) regional Doctor Diego Almada, en la que detallan las preocupaciones y complicaciones que sufren las embarazadas y sus familiares, ya que las personas de ese departamento deben trasladarse a otro (San Javier) para parir, no sólo exponiéndose a un posible contagio sino “también al impacto negativo en la subjetividad y en las condiciones materiales de existencia del grupo familiar, siendo este último obligado a asumir los costos y dificultades del traslado, las cuales se traducen en complicaciones económicas, físicas, logísticas, emocionales, psicológicas, etcétera”.
“Por un lado, en el último tiempo, muchas personas gestantes se encontraron solas al momento de parir y los días siguientes de internación, debido a que el protocolo para nacimientos vigente en el Hospital Regional Villa Dolores no permitía la presencia de un acompañante de su elección. De esta manera se violó lo dispuesto en la Ley Nacional 25.929 de Parto Humanizado, donde se hace hincapié en el derecho que tiene la madre a estar acompañada y contenida por su pareja y/o familia, como así también se violan las recomendaciones dispuestas por la OMS y no se acata lo establecido en el documento ¨COVID-19 Recomendaciones para la atención de embarazadas y recién nacidos en contexto de pandemia del Ministerio de Salud de la Nación¨”.
Romina Varas, vecina de Panaholma, relató: “fui mamá hace tres meses en esta situación de pandemia y justamente iniciamos esta etapa con el cambio del hospital de Mina Clavero. Se decide a raíz del coronavirus, que no se van a atender determinadas especialidades y los partos van a pasar a atenderse en Villa Dolores, con una disposición de mediados de marzo. En ese momento yo estaba casi de nueve meses. Yo vivo a setenta kilómetros de Villa Dolores y mi idea era parir acá a veinticinco kilómetros en Mina Clavero. Cuando sucede esto tenemos que cambiar nuestro plan de parto y yo tuve los recursos y lo pude hacer rápidamente. En tres días conseguí que me prestaran una casa a diez kilómetros de Villa Dolores, en Villa de Las Rosas, pude ir al hospital y parir en esa localidad pero para otras mujeres es sumamente estresante y complicado porque si no tenés un auto si bien se te garantiza una ambulancia para acceder al hospital las complicaciones vienen después. Pero así y todo mi caso fue sumamente traumático por tener que modificar todo mi plan en pocos días. En ese momento no había casos confirmados de coronavirus y todavía no sabíamos si era o no una zona blanca y por ende estaba el temor de que cualquiera pudiera tener el virus. La verdad fue bastante compleja la internación. Yo tuve un problema por el cual me tuve que quedar más de un día internada y ahí se complicó más para nosotros la situación, porque nadie, ni siquiera nuestros amigos que estaban en Villa de las Rosas podían acercarse a Villa Dolores a darnos una mano, llámese comida, vestimenta o lo que fuera”.
“Con el brote se endureció todo. No pueden estar los acompañantes una vez que la mujer ha parido y en la sala está sola con su bebé. Con todo lo que conlleva después de parir y si es que tenés un parto natural o de una cesárea pero dentro de lo normal. Si te pasa algo como me pasó a mí que no podía levantarme de la cama y necesitaba asistencia sí o sí… ¿cómo se hace? Por eso como familia nosotros nos sumamos para apoyar a las mujeres que están por pasar por esto”.
La nota presentada al presidente del COE resalta: “ante el brote epidemiológico de público conocimiento en la región que presenta el mayor foco de contagio en la Ciudad de Villa Dolores”, y el departamento de San Alberto cuenta con muy pocos casos positivos, “la disposición de los partos no se vio modificada y las personas residentes en San Alberto -que deben realizar un parto- deben trasladarse hasta el otro departamento, no sólo exponiéndose a un posible contagio. (…) Es de destacar que muchas familias tienen personas a cargo: hijos/as e incluso adultos/as mayores y que la situación de aislamiento social, preventivo y obligatorio complejiza la posibilidad de dar solución a los asuntos por resolver”.
“Por tanto, en vista a las consideraciones fácticas y jurídicas expuestas y al derecho que nos ampara, es que venimos a solicitar que:
● Se nos informe, dentro del plazo de 48 hs, sobre cuáles son los procedimientos, medidas o protocolos vigentes en cuanto al parto y posparto, la internación de la madre puérpera y su bebé, el cumplimiento de la cuarentena (cómo, dónde y qué medidas se exigen cumplir) y qué garantías y apoyos existen entre los Municipios de los Departamentos de San Alberto y San Javier para que sean llevados a cabo dentro de la protección de derechos.
● Se contemplen y se establezcan las medidas para garantizar que los nacimientos puedan darse en contextos seguros mientras que se nos expone a realizar los nacimientos en espacios donde están en contacto estrecho con el virus. Además del riesgo que esto supone para la salud de la mujer gestante y el/la recién nacido/a, se nos pone en situación de tener que afrontar los trastornos de cumplimentar la consecuente cuarentena. En algunos casos, esto último ha conllevado situaciones de tener que encontrar la manera de residir fuera del hogar, resolver la economía diaria sin poder trabajar, buscar cómo garantizar el cuidado de hijos/as a cargo sin poder contar con ayuda de familiares.
● Se disponga la existencia de un espacio extra-hospitalario para los nacimientos, es decir que se designe un lugar para el trabajo de parto, parto y posterior internación, en áreas libres de COVID-19, garantizados por el sistema de salud público y el equipo de obstetricia de la región. Es un deber del sistema de salud abrir las puertas a los nacimientos y garantizar que ocurran de manera armónica y segura, sin estar ligados a enfermedades y prohibiciones. Es obligación del sistema de salud brindar la posibilidad y el ámbito adecuado para que se convierta la persona gestante y su pareja en protagonistas de sus deseos y necesidades y acompañar en la toma de decisiones sobre dónde, cómo y con quién parir.
● Se garanticen los derechos contemplados en la Ley Nacional 25.929 de Parto Humanizado y en el plexo normativo vigente en la materia, ya que la situación de pandemia no puede afectar, vulnerar, ni violar los derechos contemplados por las normativas vigentes. Esperando una respuesta favorable ante nuestra petición, eso es todo cuanto tenemos que mencionar. En caso de precisar mayor información al respecto y si surgieran dudas luego de la lectura del presente, ponemos a su disposición vías de contacto para poder permanecer en comunicación: personasgestantestraslasierra@gmail.com
Dada la urgencia que presenta el tema expuesto, elevamos la presente solicitud a la espera de una pronta respuesta. Nuestros derechos no están en cuarentena. Saludamos a ud. atentamente. Personas gestantes del Valle de Traslasierra, familiares y acompañantes. Adhieren: MESA DE TRABAJO POR LOS DDHH DE TRASLASIERRA, CASA VIOLETA TRASLASIERRA, MUJERES DE TRASLASIERRA, MAMA QUILLA”.
En concordancia con el documento, Romina reafirma: “Se entiende que estamos en una situación excepcional por la pandemia. Pero entendemos que dentro de esta excepcionalidad se tendrían que garantizar los derechos”.
“Somos muchas. Han nacido un montón de niños y seguirán naciendo. Hasta hoy (28 de julio) no tuvimos ninguna respuesta”.
Podés denunciar un caso de violencia obstétrica en CONSAVIG (consavig@jus.gov.ar), en la Defensoría del Pueblo o en el INADI. Para asesorarte, podés llamar al 0800-122-5878