Cuando llegó el caluroso miércoles 18 de agosto llegaron los predecibles incendios, esta vez, a Potrero de Garay y San Clemente. Luego del momento de zozobra, la difusión mediática y el recuento de daños, un grupo de vecinos de Potrero y Villas Ciudad de América, Amigos de los Animales, se concentraron en la tarea de dar auxilio a las víctimas silenciosas de esta tragedia: las vacas y los caballos que habían quedado sin agua y sin alimento. Jenny Martínez, integrante de este grupo, nos cuenta sus impresiones:
“Nosotros fuimos a hacer un relevamiento de la zona que había sido afectada. Y lo que más se vio, además de que algunos de los animales están quemados, es que lo que más necesitan es comida y agua”.
“Los animales tratados fueron aproximadamente ochenta por ahora, aunque fueron muchos más los afectados”.
Los primeros momentos de trabajo fueron emocionalmente fuertes:
“Es desolador. Es muy feo ver el panorama después de los incendios, porque no es sólo lo material lo que se afecta sino también a los animales y a los productores que viven de ellos”.
Amigos de los Animales se queda en el lugar. Lo visitan diariamente para brindar su ayuda hasta que los pastos vuelvan a crecer.
“Dependemos de la lluvia para que el pasto brote. Nosotros estimamos tres o cuatro meses y vamos a ir aportando en la medida que podamos, en conjunto con la Comuna, todos los medios para poder ayudarlos durante todos esos meses”.
Para aquellas personas que quieran y puedan ayudar, se ha abierto una cuenta bancaria y además se aceptan gustosas las colaboraciones de todo tipo en las veterinarias de la zona.
Porque los incendios afectan la vida, toda la vida, es necesario que también los animales cuenten con ayuda.
Las imágenes fueron tomadas por los propios integrantes de Amigos de los Animales.
